Restaurando el territorio
Más del 85% de los humedales se han perdido, solo una tercera parte de los ríos permanecen intactos y, en general, el 75% de los ecosistemas han sido significativamente alterados. Dado el nivel de destrucción al que ha sido sometido nuestro planeta, nuestra tarea no es solo la conservación, sino que debemos también reparar ese daño, restaurando la naturaleza.
La restauración ecológica nos puede ayudar a revertir la pérdida de biodiversidad y a recuperar la funcionalidad de los ecosistemas, y si se hace con una perspectiva de justicia, genera resiliencia ante fenómenos derivados del cambio global.