Por un tratado de la ONU para proteger los Derechos Humanos
Del 10 al 27 de junio se está celebrando en Ginebra la 26ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas. Esta misma semana Amigos de la Tierra Internacional publica un informe en el que recoge 100 crímenes contra los derechos humanos. Con este informe en la mano y junto a una alianza internacional de movimientos sociales y ambientales está exhortando a la ONU a establecer un tratado internacional vinculante que ponga medidas para evitar las prácticas abusivas de las empresas multinacionales contra los derechos humanos [1].
Un informe de Amigos de la Tierra Internacional recopila más de 100 incidentes de violencia contra defensores de los derechos ambientales así como violaciones de sus derechos en 27 países entre noviembre de 2011 y octubre de 2013. Dicho documento se presentará el 26 de junio durante la 26ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU [2].
Amigos de la Tierra insta a establecer un tratado de la ONU para proteger los Derechos Humanos.
Más de la mitad de los asesinatos registrados por Amigos de la Tierra Internacional en estas fechas fueron asesinatos premeditados de dirigentes campesinos y muertes durante enfrentamientos violentos por conflictos de tierras, que estuvieron vinculados muchas veces a la defensa de territorios contra proyectos contaminantes, tales como represas hidroeléctricas, plantaciones de monocultivos o de extracción de petróleo, gas y minerales.
«Recibimos de media una denuncia por semana de casos de violencia contra defensores ambientales o de violación de sus derechos, y esto es tan sólo la punta del iceberg», señaló Lucia Ortiz, Coordinadora del Programa Internacional de Justicia Económica de Amigos de la Tierra Internacional.
«Estas personas, que defienden el derecho a decidir de las comunidades frente a los mega proyectos agenciados a empresas transnacionales, son blanco de abusos contra los derechos humanos, a menudo cometidos por las empresas o en su propio nombre», añadió Lucia Ortiz, coordinadora del programa de Justicia Económica de Amigos de la Tierra Internacional.
Amigos de la Tierra Internacional forma parte de la Alianza del Tratado, una alianza decidida a ponerle punto y final a las violaciones de derechos humanos perpetradas por las empresas transnacionales. Se trata de una red que urge a los Estados miembro del Consejo de Derechos Humanos a respaldar una resolución que garantice el establecimiento de un sistema jurídicamente vinculante para que las empresas transnacionales respondan ante la justicia por las violaciones de derechos humanos cometidas, y que ofrezca reparación y justica para los pueblos y personas afectadas [3] .
«Necesitamos urgentemente un tratado internacional para hacerle frente a las violaciones de derechos humanos ocasionadas por grandes multinacionales. Si reconocemos el activismo ambiental en todas sus expresiones como una defensa legítima de los derechos humanos, podremos contribuir a la lucha de los defensores de los derechos ambientales y mantenerlos a salvo», dijo Víctor Barro, presidente de Amigos de la Tierra España.
Notas:
- [1] El 7 de mayo de 2014, una alianza mundial de organizaciones de la sociedad civil conocida como la Alianza del Tratado (Treaty Alliance), que representa a más de 500 grupos, exhortó a los miembros del Consejo de Derechos Humanos de la ONU a que apoyen en junio una iniciativa que daría inicio a un proceso para establecer un tratado internacional para enfrentar las violaciones de derechos humanos perpetradas por empresas transnacionales. Por más información: https://www.foei.org/es/prensa/archivo-por-tema/justicia-economica-resistencia-al-neoliberalismo-prensa/groups-call-for-un-treaty-to-tackle-corporate-human-rights-violations/
- [2] El nuevo informe «Defendemos el medioambiente, defendemos los derechos humanos» se encuentra disponible en: https://www.foei.org/resources/publications/publications-by-subject/human-rights-defenders-publications/we-defend-the-environment-we-defend-human-rights/
- [3] En el Consejo de Derechos Humanos, un grupo de 84 países propuso en septiembre de 2013 el establecimiento de un marco normativo y de aplicación que sea jurídicamente vinculante para las empresas, lo cual representa un reclamo histórico de los movimientos de derechos humanos y Amigos de la Tierra Internacional.