La contaminación por plástico se ha convertido en uno de los principales problemas de esta década. Según la Universidad de California, ya se han producido 8.300 millones de toneladas de plástico desde su descubrimiento en 1950, pero casi la mitad de esa producción ha tenido lugar desde el año 2000. El principal problema de este material es su uso en productos de usar y tirar, que acaban en un gran porcentaje abandonados en el entorno. Cada año llegan a los océanos 9 millones de toneladas de plástico. Es como si al minuto se volcase un camión de basura cargado de plástico. Según la Fundación Ellen McArthur, si se continúa vertiendo plástico a este ritmo, en 2050 habrá más plástico que peces en los océanos.
La fabricación del plástico se localiza principalmente en Asia, el 29% en China. El segundo continente productor es Europa, con un 19%. Sin embargo el consumo está distribuido de una manera diferente. Por habitante, los países que más plástico consumen son Estados Unidos y Europa, con cerca de unos 140 Kg/persona y año. Contrasta con las personas africanas y asiáticas, que no llegan a un consumo de 50 Kg al año.
La demanda europea de plástico ronda los 49 millones de toneladas al año, de las que el 40%, unos 20 millones toneladas se destinan a envases de usar y tirar, principalmente envases alimentarios y productos sanitarios como toallitas, pañales, compresas y tampones. España es el cuarto país europeo que más plástico consume. A nivel mundial, solo se recicla una quinta parte del plástico que se produce. Las industrias envasadoras están localizadas en su mayoría en Europa y Estados Unidos, y según la regulación europea deben hacerse cargo del coste de los impactos de sus residuos, pero en la actualidad esto no se da.
Una gran parte de los residuos plásticos acaba en los océanos, y se descompone en microplásticos, o en fragmentos más pequeños que se incorporan a las cadenas alimentarias de la fauna marina, además de contaminación de entornos costeros, afectando a las comunidades que viven en las proximidades, y que basan su vida en la pesca y/o en el turismo.