Europa quiere más reducción y reciclaje; España no sabe cómo alcanzará los objetivos
El pasado domingo, 17 de diciembre, terminaban las negociaciones del trílogo europeo para modificar las Directivas de residuos, de residuos de envases y de vertedero. Desde Amigos de la Tierra consideramos que ha habido un avance con los objetivos de reciclaje, aunque lamentamos la falta de objetivos de reducción o reparación.
Una situación complicada para el Estado Español que, si ya estaba lejos de alcanzar el objetivo de reciclaje marcado por Europa en 2008, reciclar el 50% de los residuos en 2020, con los porcentajes acordados en la actualidad, necesita aplicar medidas con carácter inmediato para una gestión de residuos encaminada al residuo cero.
Terminan las negociaciones para modificar las Directivas de Residuos
Entre los objetivos acordados destacan los de reciclaje, en los que hay que alcanzar un 55% en 2025, un 60% en 2030 y un 65% en 2035; así como los de separación, la obligatoriedad de separar en origen la fracción orgánica de los residuos en 2023 y los residuos textiles en 2025.
España, a poco más de 2 años al 2020 en el que debería alcanzar al 50% de reciclaje, apenas llega a un 30%. Desde Amigos de la Tierra instamos al Gobierno español a poner en marcha medidas eficaces para alcanzar los objetivos marcados por la UE, como el puerta a puerta o el quinto contenedor con llave para la fracción orgánica, aplicación de fiscalidad ambiental o el sistema de retorno de envases, entre otras medidas.
Un avance importante, pero con asignaturas pendientes para lograr más reducción y reciclaje
A pesar de que estas modificaciones suponen un avance para los Estados Miembro, se han caído de la negociación elementos muy relevantes para el cambio de modelo hacia una economía circular, entre los que se encuentran los objetivos vinculantes para la preparación para la reutilización y la reparación de productos, los de reducción de basuras marinas o los de reducción de residuos alimentarios.
Estos aspectos han quedado listados como «buenas intenciones» y en manos de los Estados Miembro para la toma de decisiones. Respecto a los residuos alimentarios, cada país deberá fijar un objetivo de reducción, pero será voluntario y para 2030.
El Estado Español está muy lejos de los objetivos marcados
Mientras la UE dictamina la necesidad de llegar a un 50% de reciclaje en 2020, España sigue en cifras extremadamente alejadas del objetivo, con un escaso 30%. Alodia Pérez, nuestra responsable de Recursos naturales y residuos señala que “el Estado Español debe poner en marcha medidas efectivas para dar cumplimiento a los requerimientos europeos, principalmente de separación selectiva y de reciclaje. Y para avanzar hacia la economía circular, se deben plantear objetivos que el Gobierno europeo no ha sido capaz de establecer, en los que España puede ser pionera, como la lucha contra la obsolescencia, el fomento de la durabilidad de los productos, y la reducción del despilfarro alimentario».