Un proyecto para mostrar los beneficios del compostaje en la lucha frente al cambio climático
Amigos de la Tierra pone en marcha el proyecto “Aplicación de compost procedente de residuos municipales a suelos agrícolas y pastos”, para poner de manifiesto los beneficios del uso de compost en la adaptación y mitigación del cambio climático.
El proyecto, realizado por Amigos de la Tierra y la Universidad de Santiago, es la primera investigación que agrupa el análisis de compost y su aplicación, para conocer su contribución en la adaptación al cambio climático, en territorios con condiciones y características tan diferentes. En el proyecto, que cuenta con el apoyo del Ministerio para la Transición Ecológica a través de la Fundación Biodiversidad, participan 19 proveedores de compost, cuyo abono se ha aplicado en 24 suelos, desde huertos y viñedos hasta dehesas.
Cada persona genera al año casi media tonelada de basura, de la cual cerca de un 40% son residuos orgánicos. De las 22 millones de toneladas de basura que se generan al año en España, el 70% va a parar a vertederos e incineradoras, y solo el 18% a compostaje.
En un país con problemas de desertificación en más de un 70% de su territorio, y con tendencia a empeorar debido al cambio climático, no se pueden desperdiciar los recursos orgánicos que, transformados en compost, devuelven nutrientes a nuestros suelos.
El compostaje es el mejor método para gestionar los residuos orgánicos
Por este motivo en Amigos de la Tierra defiendemos el compostaje como el mejor método para gestionar los residuos orgánicos. De hecho, la legislación europea y estatal marcan el camino de la recogida separada en origen de la fracción orgánica de los residuos para hacer compost (la UE habla de recogida obligatoria en 2023 y en España se plantea adelantarla a 2020).
Los beneficios del compostaje para adaptar los suelos al cambio climático
Este proyecto busca mostrar uno de los grandes beneficios del compost, contribuir a la adaptación de los suelos al cambio climático, principalmente ante las dudas que puedan surgir a administraciones públicas y sector agrícola acerca del uso del compost.
Para ello, se ha aplicado compost, previamente analizado, procedente de 19 fuentes sobre 24 suelos, también analizados anteriormente, para obtener el máximo de información, en las regiones de Baleares, La Rioja, Madrid, Cataluña, Galicia y Aragón.
El compost seleccionado procede en todos los casos de recogida selectiva de la fracción orgánica de los residuos municipales, pero a diferente escala, compostaje comunitario, doméstico y en planta.
Pasados unos meses se analizarán los suelos para conocer los efectos del compost en su estructura, así como las mejoras del mismo en su adaptación y resiliencia frente a cambios de temperatura y disminución de la disponibilidad de agua, aunque ha de tenerse en cuenta que se trata de un plazo muy corto como para apreciarse todos los beneficios de la aplicación del compost.
Además con este proyecto, desde Amigos de la Tierra ponemos en contacto a productores de compost con propietarios de suelos, y difundimos entre la ciudadanía las prácticas que se están poniendo en marcha y sus beneficios.
Nuestra organización lleva 20 años trabajando en proyectos de compostaje en más de 30 municipios, y en campañas de presión política para lograr la separación de la materia orgánica y su compostaje.