Las 8 maneras de atentar contra el clima de Shell
Hace año y medio, con nuestros compañer@s de Países Bajos (Milieudefensie) a la cabeza, Amigos de la Tierra presentábamos formalmente una demanda a Shell.
Cientos de activistas en la sede de Shell en La Haya, hicieron entrega de la citación judicial y se inició el proceso legal contra la empresa por su inacción ante la emergencia climática, con el fin de obligarle a abandonar las actividades que estaban y están provocando la destrucción del clima.
Esta semana hemos recibimos la respuesta por parte de Shell. En ella nos dan a entender que ya creen estar haciendo lo suficiente para combatir la emergencia climática.
A continuación presentamos 8 argumentos que demuestran todo lo contrario: Shell sigue provocando la destrucción del clima y rompiendo el Acuerdo de París. Y por eso, veremos a Shell en los juzgados.
1. Shell continúa extrayendo petróleo y gas
Uno de los principales objetivos del Acuerdo de París es que cese la extracción y quema de gas y petróleo, ya que es la principal causa de la emergencia climática. Sin embargo, hace solo unas semanas Shell anunciaba su intención de aumentar la producción de petróleo y gas en un 38% en los próximos 10 años.
2. Shell invierte miles de millones en combustibles fósiles
Shell planea invertir hasta 35 mil millones de euros al año durante los próximos años, y aproximadamente solo un 6% se destinará a proyectos sostenibles. Además, sus inversiones podrían ascender a 149 mil millones en nuevos proyectos fósiles en los próximos 10 años.
3. Shell sigue siendo uno de los mayores contaminantes del mundo
Shell ocupa el 7º lugar en el ranking de compañías con las mayores emisiones históricas de dióxido de carbono. Los productos de Shell representan el 2,36% de las emisiones globales de dióxido de carbonoy metano entre 1965 y 2017. Por este motivo confirmamos que sí, Shell es culpable y ha jugado un papel importante en la crisis climática.
4. Shell es consciente desde hace tiempo de la emergencia climática, así como del rol que ha desempeñado a la hora de provocarlo
Ya en 1986, Shell advirtió que había zonas que podrían volverse inhabitables como resultado del cambio climático. En la década de 1990, la multinacional se embarcó temporalmente en una deriva más sostenible, pero abandonó sus esfuerzos rápida y repentinamente. Desde entonces, Shell ha invertido en explotar las formas de energía más contaminantes, como el gas y el petróleo entre otros.
5. Shell limita la elección del consumidor al petróleo y al gas
Shell dice que solo hará cambios en su modelo de negocio contaminante cuando los consumidores dejen de demandar petróleo y gas. Sin embargo la gente está pidiendo entas energías sucias, piden un hogar cálido o una forma de desplazarse. Al invertir miles de millones en combustibles contaminantes y mirar solo y exclusivamente por el bien de sus intereses económicos, Shell decide qué elecciones deben tomar los consumidores.
6. Shell continuará la extracción de combustibles fósiles para mantener contentos a sus accionistas
En una reciente entrevista, el responsable de Shell, Ben van Beurden, expresó su temor a que los accionistas pudieran dejar de invertir en Shell. Un miedo muy justificado, ya que muchas de esas inversiones se amortizarán en 30 años. Si los gobiernos deciden que estas reservas de petróleo y gas deben permanecer en el suelo debido a la emergencia climática, Shell y sus accionistas perderían mucho dinero.
7. Shell apuesta por tecnologías que no han sido probadas y de resultado cuestionables
Shell opina que a través de nuevas tecnologías se eliminará la contaminación por carbono del aire en el futuro, y esto le permitirá continuar las perforaciones. Sin embargo la comunidad científica advierte que estas tecnologías basadas en «captura y almacenamiento de carbono» (CCS) son arriesgadas y además no está probada su eficacia.
En el caso judicial que desafió la inacción climática del gobierno de los Países Bajos, el tribunal también concluyó que no era realista que CCS puedan resolver la crisis climática.
8. Shell, Trump y Bolsonaro: un trío muy bien avenido
Shell invierte gran parte de su dinero en proyectos que lleva a cabo en Estados Unidos y Brasil. Trump es el negacionista climático más poderoso del mundo y ha retirado a los Estados Unidos del Acuerdo de París. Bajo la presidencia de Bolsonaro grandes partes de la Amazonia de Brasil están ardiendo sin control, con graves consecuencias para el clima. Aunque Shell afirma que abraza el Acuerdo de París, la realidad es que sigue aumentando su negocio con líderes que defienden la destrucción climática.
CASO CERRADO
La Tierra se calienta, cada vez más rápido. Pero todavía estamos a tiempo. Si nos unimos, podemos liberarnos de los combustibles fósiles y enfrentarnos a la emergencia climática. Para ello compañías como Shell tendrán que cambiar drásticamente su modelo de negocio y dejar de perforar la tierra para la obtención de combustibles fósiles.
Tenemos interpuesta una importante demanda que puede sentar un gran precedente, destruir nuestro planeta es ilegal. Veremos a Shell en los tribunales para obligarles a que dejen de destruir nuestro clima. Es la hora de enfrentarse a la verdad, es hora de pedir justicia climática.
Si todavía no has firmado estás a tiempo de unirte y firmar la petición aquí!