En el marco de la crisis ecosocial actual la transición energética debe enfocarse hacia sistemas descentralizados que permitan además de una mayor resiliencia, una mayor democratización del sistema, y para que esto ocurra, la participación de la ciudadanía es una condición sine qua non.  En este contexto, las comunidades energéticas locales se erigen como actores claves.

Este informe aborda la capacidad de las comunidades energéticas de aquí a 2030 para cubrir la demanda eléctrica de buena parte de la geografía. En él presentamos los datos del autoconsumo fotovoltaico en cubiertas y tejados,  quedando patente el potencial de impulsar el autoconsumo compartido, y principalmente las comunidades energéticas por parte de la administraciones.

Descarga el informe

Con el apoyo de