LOS ALIMENTOS SON PARA LAS PERSONAS, NO PARA LAS MÁQUINAS

AMIGOS DE LA TIERRA ÁFRICA

CONFERENCIA INTERNACIONAL SOBRE AGROCOMBUSTIBLES

Organizada por Grupos de Amigos de la Tierra África, en Abuja

Los grupos de Amigos de la Tierra África, campesinos, organizaciones de la sociedad civil, personas pertenecientes al mundo del derecho y las leyes, representantes de los medios de comunicación, expertos en desarrollo, representantes de las comunidades, Ministros de Gobierno y agencias, entre otras instituciones, concurrieron en Abuja el 13 de agosto de 2008 para analizar los nuevos desafíos acarreados por la renovada escalada de los países del Norte hacia África y el uso absurdo de cultivos de alimentos como combustibles para vehículos y máquinas, mientras la población sufre cada vez más problemas de hambre.

Conferencia Agrocombustibles Amigos de la Tierra África

La conferencia proporcionó a los agentes implicados un espacio de reflexión para aumentar la concienciación social, movilizar y construir una resistencia en contra de la producción insostenible desarrollada por las multinacionales, el consumo y comercio de productos agrícolas para convertirlos en agrocombustibles, amenazando la soberanía alimentaria.

Conscientes del hecho de que los agrocombustibles están siendo promovidos por aquellos que dan prioridad a su insaciable necesidad de energía frente al sustento de la población del Sur Global, los participantes en la Conferencia concluyeron:

a.- El hambre es un problema global no porque no haya suficientes alimentos para todos sino porque todos estos alimentos no son accesibles para el conjunto de la población. Por lo tanto, la expansión de los agrocombustibles que expulsa a la población de sus tierras de cultivo, viola los derechos a la alimentación de las comunidades locales.

b.- Las comunidades pobres de África son impulsadas a abandonar sus tierras, impulsadas por las multinacionales agrícolas, con ayuda de organizaciones neoliberales como el FMI y el Banco Mundial, que trabajan en colaboración con los gobiernos.

c.- La promoción de los agrocombustibles proporciona espacios para las manipulaciones neocoloniales con el objetivo de determinar lo que la población local tiene que cultivar, dónde tiene cultivar; lo que tienen que comer e incluso los precios de estos productos.

d.- Las mismas multinacionales agrícolas y energéticas que son promotoras de los Organismos Modificados Genéticamente (o transgénicos), están también detrás del interés por los agrocombustibles como fuente de energía.

e.- África se ha convertido en el destino de productos agrícolas importados resultado de prácticas como el “dumping”, que compiten con la producción local, y destruyen la economía local que sirve de sustento a mujeres, niños, población rural y sectores de población procedentes de las zonas más pobres.

f.- La tierra arable es repartida temerariamente y explotada para llenar tanques de combustible en vez de llenar estómagos hambrientos, incrementando las situaciones de pobreza y los conflictos por los recursos entre las comunidades locales.

g.- Los agrocombustibles ponen en riesgo la existencia de pequeños y medianos campesinos que de forma inevitable pierden sus tierras y se convierten en mano de obra agrícola.

h.- Los gobiernos africanos no están financiando de forma adecuada la investigación local para incrementar la productividad agraria. En su lugar, satisfacen los dictados de las organizaciones neoliberales que promueven soluciones no africanas a problemas africanos.

i.- Es un hecho que los agrocombustibles acentúan los problemas de hambre y suponen una amenaza para alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio en el Sur Global.

j.- El biodiésel ocasiona mayores daños ambientales que los combustibles fósiles, por ejemplo en el aumento de la emisión de gases invernadero. Las investigaciones demuestran que no es ni limpio ni sostenible y que supone una carga para las reservas de agua y son una amenaza para la biodiversidad.

k.- A los campesinos se les están ofreciendo expectativas falsas de crecimiento, que les lleva de forma inevitable a una espiral de endeudamiento y bancarrota.

En función de estas afirmaciones, los participantes de la conferencia resolvieron:

a.- Los recursos africanos deben ser usados para el desarrollo de las comunidades locales, rompiendo con la situación en la que África subsidía el desarrollo del resto del planeta.

b.- África no debe abrirse a la contaminación por transgénicos a través de la ayuda alimentaria o los agrocombustibles.

c.- Los asistentes reclaman saber qué ocurrió con el borrador nigeriano de Ley de Bioseguridad y cuándo se abrirá este tema al debate y a la participación pública.

d.- La actual Política Nacional Nigeriana de Biocombustibles es un documento incoherente fuertemente sesgado contra los intereses de los propios nigerianos y el medio ambiente, y que se inclina en favor de los beneficios de las multinacionales de los agrocombustibles, que no están obligadas ni siquiera a pagar impuestos. Los participantes exigieron que este documento sea reelaborado con la participación de las partes implicadas.

e.- Los africanos deben rechazar la conversión de las tierras africanas en monocultivos y explotaciones para agrocombustibles. Estas tierras son consideradas como marginales porque este concepto supone una tapadera para la marginación de los más desfavorecidos, que son desplazados y desposeídos de sus tierras.

f.- Los gobiernos africanos deben ser responsables y asegurarse de iniciar e implementar políticas que garanticen la protección de los campesinos y proporcionarles ayudas e insumos para fomentar la producción y el cultivo de alimentos en las zonas más desfavorecidas y asegurar las soberanía alimentaria.

g.- Los gobiernos africanos deben fomentar el trabajo de científicos e ingenieros locales con la visión para fortalecer las soluciones autóctonas, adecuadas para el medio ambiente y la economía local.

h.- Las fuentes de energía alternativas, incluyendo la solar y la eólica, deben ser apoyadas y las comunidades con un consumo moderado y eficiente de energía de energía deben ser recompensadas.

i.- Las organizaciones de la sociedad civil deben fomentar y fortalecer las redes civiles nacionales y regionales para trabajar en contra de la introducción de plantaciones de agrocombustibles en África.

j.- Las medidas de mitigación deben ser consideradas dentro del principio de la responsabilidad común pero diferenciada, donde los países en desarrollo tienen derecho a desarrollarse. Sin embargo, los gobiernos africanos no deben permitir industrias intensivas en el consumo de energía que privan a la población local de sus tierras y su sustento. Por lo tanto, los gobiernos africanos deberían juzgar el “crecimiento” en términos de bienestar de la población más que en términos de incremento del Producto Interior Bruto.

En conclusión, hacemos un llamamiento a nuestros gobiernos a que asuman la responsabilidad y protejan a la población africana de estos esquemas destructivos que continúan creando una crisis alimentaria en el continente. Ni a corto ni a largo plazo obtendrá África beneficios de los agrocombustibles. Exigimos por tanto que los gobiernos africanos actúen con una sola voz en la resistencia al uso de la tierra en África para cultivar agrocombustibles.

Firmantes:

Environmental Rights Action/ Amigos de la Tierra de Nigeria

Amigos de la Tierra Sierra Leona

Center for Environment and Development/ Amigos de la Tierra Camerún.

Comité de Recursos Vitales Medioambientales (COVER)

Programa de Mujeres para el Medioambiente, Nigeria

Federación de Pobreza Urbana (FEDUP)

Asociación de Cultivadores de Cassava de Nigeria

Centro para la Defensa Legal de la Sociedad Civil (CISLAC)

Centro para el Medioambiente, los Derechos Humanos y el Desarrollo (CEHRD)

Fundación para la Integración Rural/ Urbana (FRUIT)

Centro para la Educación de Género

Defensa Legal de la Igualdad

Movimiento de Orientación Humana para Medio Ambiente

Asociación de Productores y comercializadores de Jatropha

Sociedad de Biocombustibles de Nigeria

Asociación de Pequeños y Medianos Campesinos de Nigeria (USMEFAN)

Abuja, 13 de agosto de 2008.