Comunidades energéticas para una recuperación justa
Desde Amigos de la Tierra, como parte de la “Coalición de energía comunitaria” europea, hemos firmado una carta abierta dirigida al Vice-presidente del Pacto Verde Europeo y al Comisario europeo de Energía, donde exigimos:
- Promover y financiar el desarrollo local liderado por las comunidades como medio para apoyar una recuperación justa.
- Proporcionar apoyo específico a las rehabilitaciones de edificios lideradas por la ciudadanía en el marco de la iniciativa “Renovation Wave” dentro del Pacto Verde Europeo.
- Facilitar el acceso de las comunidades energéticas a herramientas de inversiones a través del Fondo Europeo para inversiones Estratégicas (FEIE) y el Banco Europeo de Inversión (BEI).
- Asignar financiación para las comunidades de energía renovable en el mecanismo de financiación de la energía renovable para proyectos de toda la UE.
- Establecer un servicio de financiación designado (por ejemplo, en el marco del H2020) y una secretaría para las comunidades energéticas.
- Condicionar todos los rescates gubernamentales de la industria a que se utilicen para iniciar inmediatamente la transición para descarbonizar sus operaciones, e incluir una trayectoria para alcanzar la neutralidad climática en 2030.
- Apoyar las primas de incentivación y otros planes de financiación para las comunidades energéticas en los paquetes de estímulo económico.
- Asegurar que los Estados miembros tengan el apoyo y los recursos necesarios para transponer la Directiva sobre energía renovable y la Directiva sobre el mercado de la electricidad de manera oportuna y adecuada.
Europa se encuentra en un momento clave en el que prepara el plan de recuperación económica tras la devastación producida por la COVID-19. Por ello es urgente asegurar que esa recuperación económica garantice que nuestra sociedad y comunidades locales sean más resilientes y más justas a largo plazo.
El objetivo del Pacto Verde Europeo de reducir a cero las emisiones netas de gases de efecto invernadero de la UE tiene que guiar la recuperación económica del bloque europeo. Esto significa garantizar una transición energética con emisiones cero neto reales mucho antes y en consonancia con la ciencia y proteger todas la inversiones de la UE a prueba de clima, para proteger a la población y al medio ambiente de los perores efectos del cambio climático. En este sentido las iniciativas comunitarias en materia de energía son cruciales para acelerar la transición energética y aumentar la capacidad de recuperación local.
Los proyectos energéticos comunitarios generan entre 2 y 8 veces más ingresos locales que un proyecto llevado a cabo por un agente externo, y fomentan un comportamiento de ahorro energético.
Gracias a su carácter local, las comunidades son más proclives a estimular la creación de una industria fotovoltaica en Europa, ya que es más probable que apoyen a un fabricante local o regional de paneles solares, aplicando normas sociales y ambientales elevadas.
Las comunidades energéticas son un medio para crear mercados locales de energía, en los que las personas consumidoras puedan comprar energía a un precio estable y justo. Además, ofrecen un enfoque holístico de la transición energética, que abarca actividades como la producción y el suministro de energía renovable, la renovación de edificios, los servicios de flexibilidad, la eficiencia energética, la movilidad no contaminante, los conocimientos sobre la energía y otros aspectos.
Por último, las comunidades energéticas promueven la solidaridad debido a su carácter inclusivo y a su tendencia a reinvertir una parte de sus ingresos en su propia comunidad. Muchas de ellas también contribuyen a poner fin a la pobreza energética a nivel local.