Somos Juan José Ramírez -sentado en los arboles- y Bonerge Lovo -con la tortuga en la mano-. Somos pescadores y vivimos con nuestras familias en las comunidades de La Tirana e Isla Monte Cristo en la bahía de Jiquilisco, al sureste de El Salvador, en la costa del Pacífico Centroamericano.

En ambos lugares vivimos vinculados al manglar, un ecosistema rico, vivo y biodiverso del que obtenemos madera para nuestras casas. También pescamos todo el año en las aguas salobres, lo necesario para alimentar a nuestras familias y para vender en el mercado. Además a la playa llegan las tortugas marinas a desovar cada año, por lo que de turistas que vienen a ver ese espectáculo natural, obtenemos unos ingresos extra para mejorar nuestra calidad de vida.

Furtivos reconvertidos en agentes activos de conservación

Alguna gente de la zona vivíamos antes de la venta de los huevos de las tortugas, algo que no está permitido en El Salvador. Ahora aprovechamos esa experiencia para criar los huevos, proteger a las tortugas y enseñar a las personas que nos visitan como las tortugas marinas vienen cada año a desovar a las costas de Jiquilisco. Una forma sostenible que nos permite diversificar nuestra fuente de ingresos.

La subida del nivel del mar y los periodos más frecuentes de fenómenos meteorológicos extremos están acabando con el manglar más cercano la costa. Somos víctimas del cambio climático y de las emisiones de gases de los países ricos.

Hoy trabajamos pescando pero también enseñando a los visitantes el ecosistema del manglar y como se está destruyendo poco a poco. Junto con Amigos de la Tierra El Salvador y el MOVIAC (Movimiento mesoamericano de víctimas y afectadas por el cambio climático y las corporaciones) muchas comunidades nos hemos organizado para buscar una alternativa local para tener voz a nivel global.

Los impactos del cambio climático son globales pero no en todos los sitios por igual. Gente que vive en tu país, gente como tú, produce los gases de efecto invernadero y gente como nosotros pagamos las consecuencias, por esa razón ¡¡exigimos justicia climática!!.

Sinfonía por el cambio

Este texto forma parte de la publicación Sinfonía por el cambio que reúne las experiencias en primera persona de activistas que desde enfoques y posiciones diferentes desarrollan su labor asociativa, profesional o artística para favorecer la transición hacia una sociedad donde las personas y el planeta están en el centro de las políticas. Te invitamos a conocer otras de estas pequeñas historias de héroes y heroínas con las que encontrar inspiración y sumarte al cambio.

Día de acción

En el Día de Acción Global los grupos de Amigos de la Tierra nos unimos en todo el mundo por segundo año consecutivo en una acción global para reclamar justicia climática y energética, el fin de semana del 5 al 7 de octubre.

Fotos de Victor Barro