El sábado 5 de abril, desde Amigas de la Tierra nos sumamos a la primera manifestación estatal por la vivienda. Apoyamos a los colectivos y sindicatos que luchan por una vivienda digna, por eso nos vamos a las calles, todas juntas, en todas partes, unidas por la convicción de que sólo hay una receta para que la vivienda sea un derecho… ¡Acabar con el negocio de la vivienda!

Frente a unas políticas que priman la turistificación y la gentrificación del centro de la ciudad, y que expulsa a miles de vecinas de sus hogares, es necesario crear barrios habitables y adaptados al cambio climático donde se mejore la movilidad y la vida en sociedad. Necesitamos y exigimos ciudades habitables, con espacios comunitarios donde el derecho a la naturaleza y el derecho a la ciudad se den la mano.

Tenemos derecho a la naturaleza, a tener zonas verdes suficientes cerca de casa. Pero también sabemos que si no bajan y se limitan los precios de los alquileres, nos van a expulsar de nuestros barrios por el aumento de los precios.

El derecho a la ciudad no sólo consiste en vivir en éstas, sino en  transformarlas según las necesidades de las personas que las habiten. Controlar los precios del alquiler y blindar el acceso a la vivienda son mecanismos esenciales para garantizar que la necesaria implantación de proyectos de renaturalización se realice sin dejar a nadie atrás.

Los gobiernos conocen la solución al problema de la vivienda, pero no van a poner en juego sus intereses. Por eso tenemos que organizarnos y exigir todas juntas que se ponga fin a la compra especulativa. No se puede permitir la compra si no es para residir en dicha vivienda. Derecho a la ciudad es acabar con el negocio de la vivienda, garantizar que su acceso sea universal, velar por la salud pública y el interés general. ¡Únete el próximo 5 de abril!